Que es: una recaída alcoholismo / una recaída de alcohol
¿Por qué no puedo dejar el alcohol?
Cuando una persona se está recuperando de un trastorno de adicción al alcohol, una recaída de alcoholismo una recaída de alcohol es volver a beber alcohol otra vez.
Algunos estudios…
Revelan quelas personas adictas al alcohol que sufren las recaídas alcoholismo, entre un 40% y 60% lo hacen en el primer año del intento de recuperación. Hay algunos expertos que consideran que las recaídas son parte del proceso de recuperación. Nosotros en Drogadictos Anónimos tenemos la experiencia de que cada persona adicta es un mundo y que hay personas alcohólicas que también pueden recuperarse del alcoholismo sin beber por el resto de sus vidas. La clave está en aprender de los errores y seguir intentándolo.
Porque sucede una recaída del alcohol
¿Cómo toca fondo un alcohólico?
- Contratiempos en la vida laboral, de salud, o en la vida personal.
- Situaciones en las que se producen tentaciones a beber alcohol.
- Uno puede falsamente convencerse que tiene el problema de alcohol bajo control.
Como dejar las adicciones
Hay mas facilidad de recaer en los momentos tempranos de la recuperación. Y el riego es mucho mayor si uno intenta recuperarse sin ayuda externa. Un programa serio de recuperación como el programa de Drogadictos Anónimos te dará las claves estratégicas para como tratar con situaciones y personas que podrían ser considerados como disparadores de una recaída de alcoholismo.
Como identificar tus disparadores
Los expertos dicen que se pueden considerar 3 tipos principales de situaciones que pueden disparar que las personas con un trastorno de alcohol (llamado por algunos “Alcoholismo”) para que vuelvan a beber son:
- Disparadores ambientales: Estos son muy personales pero incluyen gente, lugares, o eventos sociales relacionados con el consumo de licores y alcoholes diversos. El riesgo es mayor si te mezclas en reuniones con personas que te incitan a que te des el gusto de “beberte solo un trago”. También te podrías sentir tentado a beber si ves a un ser querido o amigo haciéndolo.
- Disparadores emocionales: Sentimientos de estrés, ansiedad, enfado, tristeza, desesperanza o incluso aburrimiento, pueden disparar una recaída alcoholismo. Esto es especialmente verdad cuando tus emociones derivan de conflictos emocionales con seres próximos o queridos. Pero inclusive emociones positivas pueden ser disparadores si las celebras con alcohol.
Señales de alarma de una recaída de alcohol.
En realidad, una recaída comienza semanas o meses antes de que el alcohol pase por los labios. Los expertos dicen que ayuda pensar que las recaídas tienen tres etapas principales:
El programa de Drogadictos Anónimos
Drogadictos Anónimos es una comunidad de hombres, mujeres y tránsgeneros que comparten su fe, esperanza y valor para ayudarse unos a otros a superar el problema de las adicción a las drogas.
No estamos afiliados a ninguna organización política religiosa o de otra índole, no entramos en polémicas públicas por eso no apoyamos ni nos oponemos a ninguna causa. Nuestro objetivo primordial es permanecer sobrios y ayudar a otros al alcanzar el estado de la sobriedad, trabajando el programa de los 12 Pasos de Drogadictos Anónimos.
- La fase emocional, cuando tus sentimientos preparan el escenario para una recaída.
- La fase mental, cuando estás pensando en beber.
- La fase física, cuando actúas sobre esos pensamientos.
Si puedes reconocer las señales de advertencia de cada etapa, podrás tomar medidas para evitar una recaída.
La Recuperación y la recaída (audio)
Fase 1: Emociones
Las emociones no resueltas y la falta de cuidado de uno mismo pueden encaminarlo hacia una recaída, incluso cuando no esté pensando conscientemente en beber.
Señales de advertencia:
- Mantienes tus sentimientos de una manera introvertida.
- Todavía niegas tu trastorno por consumo de alcohol.
- Te saltas reuniones de grupos de apoyo o sesiones de terapia.
- Dejas de seguir hábitos de vida saludables, como dormir lo suficiente, comer bien y mantener la higiene.
Todas estas cosas son comunes durante la recuperación. La forma en que los gestionas marca la diferencia. Si comienza a considerarse un fracaso, es más probable que pase a la siguiente etapa de recaída. En lugar de ello, piensa en ellos como obstáculos que puedes superar.
Qué puedes hacer: Presta atención a tus necesidades físicas y emocionales. Vuelva a los conceptos básicos de la recuperación, como el cuidado personal y hablar con tu equipo de apoyo. Un terapeuta o consejero (padrino o madrina) puede mostrarle formas saludables de lidiar con sus emociones.
Fase 2: Pensamientos
Cuanto más te descuides emocionalmente, más probabilidades tendrás de empezar a pensar en beber de nuevo. Durante esta etapa, la parte de ti que sabe lo importante que es no beber se debilita. Y la parte que recuerda el alcohol como un escape se hace más fuerte.
Señales de alerta:
- Piensas constantemente en beber.
- Recuerdas con cariño tus días de bebedor.
- Tienes pensamientos que puedes permitirte un trago, como beber sólo durante las vacaciones.
- Vas a lugares que sabes que son lugares disparadores, como tu bar favorito.
- Empiezas a planificar un episodio de bebida y te dices a ti mismo que será uno no más y listo.
Tener antojos o pensamientos ocasionales de beber es normal durante la recuperación. Pero cuando sigues pensando en ello y empiezas a planificar cómo hacerlo, es hora de buscar ayuda.
Qué puedes hacer: necesitas recuperar el control sobre tus pensamientos sobre la bebida. No se sienta culpable ni tenga miedo de hablar con otros sobre sus luchas. El programa de Drogadictos Anónimos puede ayudar.
Fase 3: Acciones
Esta fase es la de beber otra vez (recaída) puede empezar por:
- Una bebida o trago puedes pensar que lo vas a controlar o nadie se va a enterar.
- Pensamiento obsesivo y descontrolado acerca de beber.
Qué puedes hacer: nunca es demasiado tarde para buscar ayuda. Después de una recaída, si aún no estás en un programa de tratamiento, es hora de encontrar uno.
Si ha estado en un programa, comuníquese inmediatamente con su consejero, padrino o madrina, terapeuta, grupo de apoyo o mentor. Vuelva a comprometerse con su plan de cuidado personal, especialmente con actividades que alivien el estrés y otros desencadenantes emocionales.
Piense en las cosas que provocaron o empeoraron esta recaída y cómo eliminarlas de su vida. Si un desencadenante es inevitable, considere qué puede hacer de manera diferente la próxima vez que lo enfrente.
Sobre todo, vea una recaída como un revés temporal y no como un fracaso moral.
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